La Dirección Financiera es una parte fundamental de la gestión empresarial para aquellas empresas que no dispongan de esta figura y quieran crecer y maximizar el valor de su empresa.
Para poder conseguir este objetivo, es fundamental implementar estrategias que permitan mejorar la rentabilidad de la empresa.
A continuación exponemos una serie de recomendaciones que sin duda alguna ayudan a mejorar la rentabilidad y consecuentemente maximizar el valor de la empresa.
Planificación Financiera:
Disponer de un plan financiero que contemple todas las áreas de la empresa es fundamental. Contar con un plan que incluya los ingresos, costes, inversiones y
financiación ya que ello nos permitirá anticiparnos a escenarios futuros y tomar decisiones estratégicas.
Control de Costes:
Conocer los costes de la empresa es fundamental, llevar a cabo una correcta clasificación de los mismos y escoger el sistema de costes ( Direct Codt, Full Cost…..) más adecuado para nuestra empresa va a influir en la toma de decisiones. Consecuentemente podremos configurar los precios de venta asegurando rentabilidad para la empresa.
Gestión de tesorería:
La gestión de la tesorería es un aspecto clave de la dirección financiera puesto que de ella depende el hecho de poder hacer frente a los compromisos de liquidez que tenga la empresa. La gestión de la tesorería debe de asegurar que la empresa tenga el adecuado equilibrio financiero y pueda desarrollar su actividad sin problemas de liquidez. Además, una correcta gestión de la tesorería nos permitirá ver en cada ciclo económico de la empresa si aparecen necesidades de financiación.
Gestión de Riesgos:
La gestión de los riesgos es otro de los aspectos de vital importancia en la empresa y la figura de la dirección financiera juega un papel primordial. La Dirección Financiera debe de identificar los riesgos, evaluar su impacto y desarrollar estrategias que permitan disminuir el impacto en la empresa. Para ello contar con un plan de gestión de riesgos permitirá mejorar la rentabilidad de la empresa y asegurar su éxito en el largo plazo.
De los cuatro puntos expuestos en este artículo podemos sacar como conclusiones que la Dirección Financiera es clave para asegurar el éxito de la empresa y que realizar la planificación financiera, el control de costes y la gestión de la tesorería sin duda alguna van a mejorar la rentabilidad de la empresa y a ayudar tomar las decisiones más adecuadas en cada momento.
Por lo tanto implementar estas recomendaciones en tu empresa van a asegurar el éxito de la misma en el largo plazo.